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No aportamos nada nuevo si decimos que la hidratación es uno de los pilares fundamentales para el buen rendimiento de los corredores. Lo sabemos. Pero en lo que seguro que todos coincidimos es en la necesidad de hidratarnos con nuestra bebida deportiva a la temperatura que deseamos, una pretensión complicada cuando entrenamos o competimos en condiciones climatológicas extremas, donde el calor provoca que nuestro agua o isotónica se quede “como un caldo” en cuestión de minutos.
Para satisfacer esa necesidad y lograr que el momento de la hidratación sea realmente refrescante nace Cool&Hot. Hablamos de una funda térmica en la que los corredores, ciclistas, senderistas, triatletas y cualquier practicante de deportes al aire libre pueden introducir sus clásicas bolsas de hidratación para conseguir mantener la temperatura del líquido. Por tanto, es importante reseñar que Cool&Hot no es una bolsa de hidratación, ni un soft-flask; es la funda térmica que logra que esos productos mantengan durante horas la temperatura deseada.
Así, en la colección de Cool&Hot encontramos hasta cuatro tamaños de fundas (XS, S, M y L) que permiten incorporar cómodamente depósitos desde 250 ml hasta los 3 litros de capacidad, de modo que son compatibles con los soft-flask más pequeños del mercado (los habituales de los corredores) y también con las bolsas de hidratación que se llevan a la espalda en las carreras de larga distancia o las que utilizan habitualmente los ciclistas.
Hemos conseguido hacer rodajes de larga distancia manteniendo la temperatura del agua siempre fresca, desde el principio hasta el final.
Tras pasar unas semanas con el producto, en nuestro caso un par de fundas de tamaño XS que hemos utilizado con soft-flask de 250 ml en nuestro chaleco habitual de hidratación, podemos asegurar que el agua mantiene su temperatura durante varias horas tras sacar los bidones de la nevera. Lo explicamos: el día anterior al entrenamiento llenamos nuestros soft-flask, los metemos en la nevera y, al día siguiente, momentos antes de empezar a correr, los sacamos y los guardamos en las fundas Cool&Hot (las fundas no hay que meterlas en la nevera, solo los bidones). ¡Y listo!
Aunque la funda no recubre por completo el bidón, ya que deja la parte de arriba descubierta, las propiedades aislantes del producto actúan con la misma eficacia; no es necesario ese hermetismo. Así, hemos conseguido hacer rodajes de larga distancia manteniendo la temperatura del agua siempre fresca, desde el principio hasta el final. El producto está fabricado en su capa externa por un tejido impermeable que evita el efecto de condensación (y por tanto no nos moja la mochila ni se filtra esa humedad) y en su forro interior por una mezcla de poliéster y aluminio de polietileno. Tras utilizarlo en varias ocasiones no hemos notado deterioro ninguno y lo hemos lavado a mano con suma facilidad.
En resumen, estamos ante un producto original, de gran utilidad, de precio económico y de uso fácil que va a permitirnos disfrutar más del momento de la hidratación, sobre todo en los meses que llegan de fuerte calor. Y aunque no hemos podido comprobarlo por la época del año en la que estamos, Cool&Hot también promete mantener la temperatura a la inversa, es decir, si introducimos un líquido caliente en el bidón (por ejemplo un café o un té) y nos marchamos a pasar el día a la nieve, podremos disfrutar de nuestra bebida caliente hasta pasadas unas horas.
Más información y pedidos en https://coolandhot.shop/es
