Nutrición

El cuento de las agujetas y el agua con azúcar

Y si esto del agua con azúcar no funciona, ¿qué puede realmente ayudarme con las agujetas?

1 minuto

Un corredor en el Maratón de Praga 2019 | RunCzech

Durante años fue una de las recetas que más circulaba entre los deportistas principiantes "demolidos" por las agujetas de los primeros entrenamientos. "Te tomas un vaso con azúcar cuando llegues a casa y ya verás que mañana estás mejor". La decepción tardaba en llegar unas horas: esas dolorosas molestias no desparecían por beber agua azucarada que hubieras bebido.

Se trata de esa sensación de dolor muscular que aparece tras un esfuerzo físico intenso que provoca microrroturas musculares muy pequeñitas. Es algo común en cualquier proceso de entrenamiento, sobre todo al principio, y va disminuyendo con la adaptación de nuestro organismo al entrenamiento.

Hasta el momento no existen evidencias de remedio alguno para prevenir las agujetas o eliminarlas una vez que aparezcan, salvo las recomendaciones para realizar estiramientos suaves y una práctica deportiva moderada tras el esfuerzo intenso que las provocó. Aunque puede ser lógico pensar que el descanso completo ayudará a la recuperación, este no es el camino adecuado. Por el contrario, una actividad de intensidad baja o media te ayudará a superar con mayor celeridad esas agujetas que te torturan.

ESTO SI TE PUEDE AYUDAR FRENTE A LAS AGUJETAS

Vamos a "recetarte; 3 soluciones diferentes:

  • Tomar algo de proteína la misma noche en la que has hecho el esfuerzo. Realizar estiramientos suaves el día siguiente y aplicarte agua fría o alguna crema analgésica a tu musculatura.
  • Te ayudará también darle continuidad al entrenamiento. El día siguiente al esfuerzo, en el momento más álgido de las agujetas, será conveniente salir a dar un paseo o a trotar suavemente. Solo desaparecerán por la adaptación del músculo al ejercicio.
  • Hidratarse es clave para vencer esta situación. El equilibrio electrolítico también será importante. Esto significa tener un buen nivel de hidratación y de mineralización.