Entrenamiento

Posturas de yoga para principiantes

El yoga es una disciplina que alinea cuerpo y mente y que aporta beneficios tanto a nivel personal como terapéuticos y deportivos

Noelia Hontoria

2 minutos

Esta es la postura más clásica para principiantes

El yoga es una modalidad que busca proporcionar una estabilidad física y mental. Si nunca lo has practicado, es probable que pienses en ella como una disciplina de posturas imposibles que requiere mucha flexibilidad. Sin embargo, no es así. El yoga siempre pretende adaptarse a las posibilidades de cada individuo. Además, no solo el cuerpo influye en la correcta ejecución de las posturas de yoga, también tu estado de relajación y concentración.

Posturas de yoga que puedes probar si eres principiante

Para iniciarte en el yoga puedes optar por acudir a clases guiadas en un gimnasio o academia, o seguir tu propio ritmo desde la comodidad de tu casa. En este último caso, solo necesitarás una esterilla y un ambiente en calma.

Si quieres empezar, no participes en una clase de nivel avanzado o te frustrarás cuando veas que no cumples con la intensidad de los ejercicios. Necesitarás adaptarte a esta práctica, aunque seas un deportista experimentado, por lo que te recomendamos probar, ya sea en casa o en el gimnasio, con algunas de las siguientes posturas de yoga para principiantes.

  • Postura de meditación. Esta es la postura más clásica, la primera que acude a tu mente cuando piensas en el yoga. Consiste en sentarse sobre los talones, con el talón izquierdo bajo el glúteo derecho y el talón derecho bajo el glúteo izquierdo, y apoyar las muñecas sobre las rodillas, con el dedo índice y el pulgar tocándose. Concéntrate en la respiración, inspira y expira de forma suave, mientras dejas que la mente medite sin ningún tipo de estrés ni preocupación.

Esta es la postura de luna creciente, una de las más populares
  • Luna creciente. Esta postura te ayudará a estirar el cuerpo, tonificar y ganar flexibilidad a la vez que relajas la mente. Coloca un pie delante, con la rodilla flexionada, más o menos a la altura de las costillas, y estira el otro pie hacia atrás, apoyando la rodilla en el suelo. Junta las manos, sube los brazos mientras arqueas ligeramente la espalda hacia atrás y concéntrate en mantener el equilibrio.

  • Balanceo con rodillas al pecho. Esta parece una posición muy sencilla, pero es probable que te cueste un poco más hacerla. Sin embargo, es de las posturas de yoga para principiantes más recomendadas, ya que te ayudará a relajarte y a aprender a controlar tu flexibilidad. Túmbate boca arriba sobre la esterilla, lleva las rodillas al pecho y rodéalas con los brazos. Balancéate suavemente y siente el recorrido de la esterilla a lo largo de tu espalda.