Correr bajo la lluvia puede llegar a resultar muy reconfortante. Incluso épico y memorable. Pero también puede ser una tortura, más todavía si lo haces por la obligación de participar en esa carrera a la que te apuntaste hace meses y que no quieres dejar pasar por nada del mundo. El maratón que llevas tanto tiempo preparando, el medio maratón en el que ibas a bajar tu marca o el 10K en el que querías demostrar que eres tan veloz como el resto de compañeros del grupo de entrenamiento.
A continuación te ofrecemos algunos consejos que puedes aplicar el mismo día de la competición si la previsión del tiempo es catastrófica. Desde la equipación que tienes que llevar a qué hacer antes y después de la carrera.
LA EQUIPACIÓN
Todo empieza en casa cuando preparas la mochila que llevarás a la carrera. Lo primero que tienes que pensar es en los cambios de ropa que necesitarás. Nosotros te recomendamos tres: uno para calentar, otro para competir y otro para volver a casa. Ropa interior de recambio, calcetines, gorra, guantes... Que no se te olvide nada y siempre triplicando las prendas.
Quizá lo que más te preocupe sea la ropa de competición. Aquí dependemos de la temperatura, ya que si esta es agradable, podrás competir como siempre, sabiendo que te vas a empapar, pero incluyendo una gorra para evitar que la lluvia te moleste. Si la temperatura es baja, como ocurrió en el Maratón de Boston 2018, será mejor que te abrigues. Si utilizas un chubasquero muy grueso, no te pases con las capas interiores, porque de esta forma crearás demasiada humedad que acabará perjudicándote.
TRES TRUCOS
- COCA COLA EN LAS ZAPATILLAS: Si la carrera es muy rápida y el suelo sobre el que vas a correr es resbaladizo, ponle un poco de Coca-Cola a la suela de tus zapatillas. También funciona, y muy bien, utilizar el clásico spray de Cadena Líquida para las ruedas de los coches, aunque el remedio del refresco es más fácil de conseguir en la salida de una prueba.
- VASELINA EN LAS CEJAS: Como lo oyes. Si pones un poquito de vaselina sobre tus cejas, evitarás que el agua (y el sudor) caiga directamente a tus ojos. Este consejo también es aplicable a los días de verano con mucho calor, en los que sudas más de la cuenta.
- CALIENTAMANOS: No te estamos diciendo que juegues al clásico pasatiempo infantil (aunque también podría valer). Lo que te recomendamos es un artilugio que te calienta las manos dando una sensación muy reconfortante. Utilízalo durante el calentamiento y verás cómo el mundo se ve de otra forma.
EL CALENTAMIENTO
Lo más importante en este tipo de días es que mantengas tus rutinas, también bajo la lluvia. Todo estará bajo control siempre y cuando tengas tu ropa de recambio preparada y seca. Completa el calentamiento como siempre lo haces y no te pongas la ropa de competir hasta los momentos previos de la salida. Ya sabemos que el guardarropa estará saturado, pero persiste para poder ponerte tu ropa seca y salir a la carrera.
¿UTILIZO ROPA IMPERMEABLE?
Como hemos dicho antes y si la temperatura no es muy baja, la ropa impermeable solo la utilizaremos antes y después de la carrera. Este tipo de prendas son perfectas para aislarnos de la lluvia pero también resultan pesadas y nos hacen pasar mucho calor cuando nuestro cuerpo se calienta. En competición vas a mojarte igualmente, así que si no hace mucho frío será mejor que salgas con tu pantalón corto y tu camiseta de tirantes habitual. Puedes incluir, como te hemos dicho, una gorra, unos manguitos y unos guantes en tu equipación. Aunque debes saber que también acabarán empapados.
¿Y SI ME QUEDO EN CASA?
"Cobarde, ¡te has rajado". Sí, te lo van a decir. Pero eres tú quien tiene que valorar la necesidad de competir en una u otra carrera. Si tu objetivo principal va más allá de la prueba en la que va a hacer un tiempo horrible, plantea quedarte en casa y realizar ese entrenamiento (porque lo que ibas a realizar era un entrenamiento de cara a un objetivo más importante) en unas condiciones más favorables y en las que tu cuerpo no sufra tanto los rigores del mal tiempo.
Sobre todo, no dejes influenciarte por lo que te digan tus compañeros de entrenamiento y sé tú mismo junto con tu entrenador los que decidáis si la competición que está por venir es tan necesaria.
