Rodrigo Gavela es un gran ejemplo de cómo pasar de corredor popular a corredor de elite. Apasionado por correr desde pequeño en el pueblo del Bierzo en el que creció (Fabero) fue cuando vino a Madrid cuando empezó a correr pruebas populares. Y a base de tenacidad logró el récord de España de Maratón (con 2h 10, y que luego sería batido por Martín Fiz) y clasificarse para participar en el maratón de los Juegos Olímpicos de Barcelona en los que estuvo con los mejores hasta el pie de la montaña de Montjüic pero un inoportuno tirón le apartó de ser finalista olímpico y quién sabe si hasta de una medalla.
Una lesión le obligó a retirarse muy joven y paso a entrenar a corredores populares. Son muchos los que pasaron por sus manos en la Escuela del Corredor de Oberon en Madrid. Y muchos los que siguiendo su método de entrenamiento, incluído el celebre tres de los dos seismiles que inventó para predecir la marca en los 42'195 km, lograron mejorar sus marcas.
Sin duda, Rodrigo Gavela es uno de los mejores maestros para conseguir coger el camino correcto para enfrentarse al gran reto de lograr de bajar de tres horas en maratón que si serio es siempre el reto de los 42'195 km mucho más cuando el objetivo es ambicioso, Como dice el propio atleta y entrenador leonés (que ahora es director técnico del Zurich Maratón de Sevilla o de la Carrera de la Mujer Central Lechera Asturiana entre otras pruebas, es una marca para la que se necesita ya unas condiciones físicas mínimas. Si acabar un maratón está al alcance prácticamente de todo el momento que hace un entrenamiento adecuado y lo hace ya con una experiencia como corredor suficiente, bajar de tres horas requiere de algo más que esfuerzo, sacrificio, buena alimentación, descanso y un método de entrenamiento adecuado. Necesita tener unas condiciones genéticas, un Vo2, que lo haga posible.
No os perdáis este vídeo que en poco más de cinco minutos Rodrigo Gavela nos expone las claves de su método para bajar de tres horas en maratón. Entre las cosas que mantiene Rodrigo es que no es partidiario de esos rodajes largos realmente largos que hacen muchos maratonianos. Considera el "maestro" Gavela que rodajes de 1 hora y 45 minutos en progresión, terminando la última media hora por debajo del ritmo previsto en el maratón (que sería 4 minutos y 15 segundos) es suficiente para afrontar con éxito el desafío de correr en menos de tres horas el maratón. "El corredor muchas veces corre demasiados kilómetros y demasiado rápido y olvida que el día que realmente hay que competir es el del maratón, no hay que competir en los entrenamientos".