- Uso: correr diario
- Pisada: neutra
- Peso: 261 g (mujer) y 320 g (hombre)
- Drop: 5 mm
- 225 €
La Hoka Skyward X es una súper zapatilla de running para entrenar, no competir. Es un modelo curioso y bastante innovador, porque utiliza una de las mejores espumas de la marca, de esas ligeras y reactivas, y una nueva placa de fibra de carbono cóncava que consiguen muchísima elasticidad y rebote cuando aplastas la media suela, y una protección total frente al impacto contra el suelo.

A simple vista ya ve que tiene una gran cantidad de espuma bajo los pies, concretamente 49 mm, lo que supone casi el doble de los que solía tener antes una zapatilla de entrenamiento diario. La Skyward X mezcla dos tecnologías para estructurar su media suela. Por un lado, el marco SCF EVA que proporciona una geometría inherentemente estable; y por dentro un núcleo de espuma Peba que hace que se siente suave y reactiva. Con esa estructura y altura es capaz de comportarse bien en una amplia gama de ritmos y distancias. A su vez, la placa de fibra de carbono, curvada en el centro, actúa como un sistema de suspensión comprimiéndose y recuperándose con cada paso para ofrecer una transición muy diferente a lo que conocemos hasta ahora.
La suela tampoco tiene un patrón ‘normal’ o clásico. Para ayudar a maximizar la durabilidad y al movimiento que provocan sus tecnologías, la suela exterior tiene un buen vaciado y está hecha de caucho de alta abrasión que garantiza longevidad y agarre en cualquier superficie. Tiene suficiente grosor para que sea resistente para los corredores de mayor envergadura, aguantando así las presiones y los kilómetros.

Laa Hoka Skyward X llega con una parte superior de punto plano hecha de poliéster reciclado. Tiene pocos refuerzos, pero a cambio el soporte se consigue con zonas más tupidas en el tejido. El diseño es liviano y sostenible, pero algo caluroso en los días más soleados debido a como arropa todo ese hilo el pie. Bien reforzado está el talón para esos corredores más grandes. Tiene un marco exterior moldeado en TPU que le da mucha firmeza, pero afortunadamente su finalización en punta deja al tendón de Aquiles libre de presiones. El sistema de cordones bloquea bien la parte media del pie (yo personalmente no he necesitado apretarlos demasiado, al contrario más bien), creando la combinación perfecta de comodidad y rendimiento según los aprietes.

CÓMO SE COMPORTA
Con la Skyward X tengo sentimientos encontrados. Por una parte, me gusta mucho esa máxima protección que resulta con la espectacular media suela, perfecta para los días que tienes las ‘piernas de madera’ y necesitas recuperar. Por otro lado, cuando corro despacio con ellas la placa me provoca cierta incomodidad porque hace que el pie se balancee demasiado, cuando solo espero y necesito y un apoyo firme y seguro. En ese momento me sobra la placa de fibra de carbono. Esta se empieza a sentir eficiente cuando el ritmo aumenta, y la espuma ayuda también, pero le falta el “rocker” que tienen normalmente las Hoka para que sea más dinámica y fácil de mover. Cuando he intentado correr rápido con ellas me han resultado toscas, aunque es verdad que no tengo mucho peso y creo que no es una zapatilla pensada para un corredor como yo.

La Hoka Skyward X te encantará si eres un corredor o corredora grande, con potencia, y buscas una zapatilla de running anti lesiones que puedas llevar en las tiradas largas o en los días de recuperación. No te desagradarán las sensaciones con ellas, incluso al acelerar el ritmo.