Fallece Emma Roca, leyenda de las carreras de montaña

Pionera de los deportes de resistencia y de la investigación en deporte y salud

Fallece Emma Roca, leyenda de las carreras de montaña
Fallece Emma Roca, leyenda de las carreras de montaña

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Emma Roca, pionera de los deportes de aventura y del trail en nuestro país, ha fallecido hoy a los 48 años víctima de un cáncer que le diagnosticaron en 2018. Emma ha luchado hasta el final para vencer a la enfermedad, como hacía en sus competiciones, con esas ganas y actitud positiva que le caracterizaba y que admirábamos.

Emma, mucho más que una corredora, ha sido una pionera desde el punto de vista deportivo y una pionera en la investigación. Licenciada en bioquímica, doctorada en Ingeniería Biomédica y deportista de resistencia, y cofundadora de varias empresas relacionadas con el deporte y la salud, ha sido una de las personas que más ha luchado por la salud de este deporte y por la de sus compañeros deportistas. 

Mientras estaba en la universidad, Emma trabajaba los veranos de auxiliar forestal en diferentes parques de bomberos, donde conoció a su pareja, David, con quien ha compartido su vida y ha tenido tres hijos, Irina, Martí y Mariona. Impartía clases, hacía guardias como bombera y seguía compitiendo en todo tipo de disciplinas deportivas:  triatlones, duatlones, ironmans, maratones y ultramaratones de montaña, mountain bike, esquí de montaña o raids de aventura. 

En su completa web, en el apartado personal, Emma se describía a sí misma en diversos apartados: Bioquímica, Madre, Bombero. Y en 2018 añadió otro apartado más: cáncer, donde explicaba desde el inicio su enfermedad y actitud ante la misma. Reproducimos aquí las palabras de Emma en ese maldito apartado, porque no se puede describir mejor lo que se siente cuando cruzas la línea entre la salud y la enfermedad, y porque nos parecen muy inspiradoras para valorar, los vivos, lo que tenemos nuestro día a día.  

A veces piensas qué mala suerte ha tenido ese amigo o familiar, cuando sufre una desgracia, un accidente o pasa un mal momento, tú te sientes invulnerable y no le das importancia a que salga el sol cada mañana. Vives en un mundo donde te consideras invencible, fuerte, con una buena alimentación y entorno familiar, capaz de todo y con un cuerpo muy preparado para cualquier situación. No valoras estar bien, con salud y capaz de hacer las cosas cotidianas sin problemas. Incluso cosas tan banales como ir al lavabo a diario o poder comer lo que te apetezca. Pero la línea es muy fina. La salud es tan dinámica que debería ser un verbo y no un sustantivo. De un día para otro tu estabilidad física y emocional puede tambalearse, tus valores y prioridades pueden cambiar y ya no eres la misma.

A finales de 2018 me diagnosticaron a través de una biopsia un liquen escleroso* en los labios vulvares. Me trataron con cremas de corticoides hasta que, a principios de 2020, las cremas ya no me hacían nada y todo lo que me recetaban empeoraba la piel de la vulva, el dolor era tan grande que me dejó inmóvil en la cama durante semanas.

Tras ser visitada durante más de 4 meses por 5 ginecólogos y 2 dermatólogos distintos no encontraron lo que podía tener. Finalmente los especialistas en vulva Dra. Cararach y Dr. Fusté hicieron biopsias y RMN encontrando un carcinomavulvar** en los labios y más células malignas en los ganglios inguinales. Todos quedamos sorprendidos, ya que es poco usual y aparece en mujeres mayores de 70 años. Yo lo asocio al liquen que tenía hacía un año y medio, a la fricción de correr y la bici, al abuso de las cremas con corticoides, al tipo de tejido deportivo que toca los labios vulvares y sobre todo, al estrés. Es un conjunto de muchas cosas, y sé que el cáncer no le podemos colgar la etiqueta de una sola causa, es multifactorial. El 17 de junio de 2020 me pudieron hacer una cirugía impecable extirpando las células malignas de los labios (Vulvectomía total) y de los ganglios inguinales (linfidenectomia inguinofemoral radical bilateral). 

CUANDO LA VIDA TE DA UNA NUEVA OPORTUNIDAD, TE DAS CUENTA DE LO AFORTUNADA QUE ERES

De cómo has vivido con una ceguera constante, de cómo puedes vivir más plenamente, con una conciencia diferente. Ahora me levanto y pienso en las cosas que todavía me quedan por hacer con mi família y los momentos que podemos vivir juntos. Veo la enfermedad como un camino para el crecimiento espiritual y personal. Empiezo el día agradecida, feliz, con ganas de dar amor y recibirlo. Y aunque las palabras que ahora salgan por mi boca suenen cursis, tienen una fuerza enorme, porque me hacen sentir completa aunque ya no tengo una parte muy íntima de mí.

No dejaré de hacer deporte, no dejaré de tener proyectos, de investigar y publicar, pero yo y mi entorno más cercano ha cogido una nueva prioridad y otra velocidad.

‍Si para algunos, este despertar ha podido ser el confinamiento, para mí ha sido un mal que me ha inmovilizado durante semanas, que me ha provocado muchísimo dolor, que me ha consumido por la incertidumbre del no saber qué tenía, pero que finalmente me ha dado una nueva oportunidad. Y no la pienso desaprovechar.

Agradecida para siempre.

Agradecidos para siempre también nosotros. Adiós Emma, descansa en paz. Gracias por lo que has hecho por este deporte, nos vemos en las montañas. 

Pioneros del trail (VI): Emma Roca
Emma Roca