Los juanetes son una patología de los pies bastante común. Se trata de una deformación ósea que provoca un saliente en el dedo gordo del pie. La mayoría de las veces está causada por un factor hereditario, pero en ocasiones una mala pisada o el uso de un calzado inadecuado también se encuentran detrás de este problema.
Cómo prevenir los juanetes conociendo las causas
Si descartas el componente hereditario de esta patología, puedes encontrar la forma de prevenir los juanetes si atacas directamente a su causa.
Tal y como acabamos de ver, los juanetes pueden estar ocasionados por una mala pisada. Como ya sabes, existen diferentes tipos de pisadas, por lo que si pisas de forma incorrecta de manera reiterada y sin poner solución, puedes desarrollar juanetes en la edad adulta. En este caso, la forma de evitarlos es escoger un calzado adecuado: opta por zapatos reforzados según el tipo de pisada que tengas, evita los tacones, usa tejidos transpirables y elige aquellos que sean de horma ancha, especialmente en la parte delantera para que no aprisionen los pies.
Cuando los juanetes son consecuencia de un calzado inapropiado, te puede ayudar el hecho de ir descalzo todo el tiempo que sea posible. Incluso hay especialistas que recomiendan practicar ejercicio descalzo. Obviamente, debes tener cuidado de no clavarte nada del suelo y hacer deporte en superficies o máquinas que no puedan lastimar tus pies.
Otra forma de prevenir los juanetes es utilizar plantillas correctoras. Lo ideal es que acudas a un podólogo para que pueda hacer un estudio personalizado de tus pies y valore si realmente las necesitas. En ese caso, también te proporcionará las más adecuadas para ti.
Si ya han aparecido, ¿puedo tratar los juanetes?
Para los juanetes, tanto si hay antecedentes familiares como si no, lo mejor es poner el foco de atención en la prevención. Como has podido comprobar, no es tan complicado. Solo tienes que cuidar el calzado que utilizas, dejar los pies al aire siempre que puedas y emplear plantillas correctoras si lo necesitas.
Una vez que ya han aparecido, lamentamos decirte que el único tratamiento efectivo es la cirugía. Según la gravedad del juanete, puede ser una cirugía más o menos importante. En algunas ocasiones, bastará con una pequeña incisión para pulir el hueso. En cambio, si no quieres pasar por este trance, deberás hacer frente a ellos a través de las pautas que hemos enumerado anteriormente, es decir, adaptar tu rutina a ellos para evitar que sigan progresando. Eso sí, debes tener en cuenta que, aunque elimines el juanete con cirugía, puede volver a aparecer.