Así te ayuda correr para conseguir dejar de fumar

Engancharte al running puede ser tu mejor solución para lograr dejar para siempre el humo de los cigarrillos

Así te ayuda correr para conseguir dejar de fumar
Así te ayuda correr para conseguir dejar de fumar

No es nada fácil dejar el vicio del tabaco. Aunque ya no queda nadie que dude de las ventajas para tu salud de dejar los cigarrillos, hace falta mucha fuerza de voluntad para dejarlo para siempre.

Correr puede ser una muy buena herramienta a la hora de lograr dejar el tabaco. Y además te van a ayudar a minimizar los daños causados en tu organismo por años de adicción al tabaco. Tus arterias y pulmones, dañados por años de humo, se recuperan. Según un estudio realizado en Inglaterra con 35.000 fumadores se demostró que en dos años haciendo ejercicio aeróbico de forma regular limpias totalmente los pulmones y las arterias (disminuyes así el riesgo de infarto o embolias); eso sí, no evitas el riesgo de cáncer, que sigue totalmente latente por tu época de fumador.

Otra ventaja notable de ponerte a correr en el momento de dejar los cigarrillos es que frenas un efecto secundario importante. Es bastante habitual entre los que dejan de fumar uno de los problemas es que cogen kilos ya que recurren a la comida como sustituto del tabaco. Ponerte a correr, con lo que supone de quema extra de calorías y de activación de tu metabolismo, contribuye no sólo a impedir que engordes sino que seguramente vas a lograr quitarte algún kilo de más si es que los tenías.

Además correr aumenta tu autoestima lo que se convierte en “gasolina" para aumentar tu fuerza de voluntad, el punto clave a la hora de conseguir no caer en la tentación de comprar la siguiente cajetilla.

¡Y encima ahorras dinero! Bien se puede decir que con lo que ahorra un exfumador de una cajetilla de diaria podría pagarse el viaje gratis a correr cualquier maratón de los Majors, incluído el de Nueva York.

Así debes entrenar

  • Tendrás una primera fase de coger forma física, que puede durar entre 1 ó 3 meses. Hay gente que fuma y previamente ha hecho algo de deporte, pero hay otros que nada de nada de ejercicio físico (a estos les recomendamos un plan que combina andar-correr; por ejemplo, empezar con media hora alternando tres minutos andando y 1 corriendo y cada vez ir quitando minutos de andar y sumar de correr hasta que haces la media hora trotando entera).

  • El punto de inflexión es cuando se llega a una hora de carrera seguida sin dificultad. En ese momento, tienes la opción de ganar velocidad (metiendo un día a la semana, de entrenamientos de juegos de ritmo, como hemos visto en el aparatado de pérdida de peso)

  • Aquellos que ya tienen un nivel de forma físico aceptable pueden marcarse como objetivo una carrera de 10 km o media maratón. En ese caso lo mejor es que sigan un plan de entrenamiento para evitar mejorar con control (lo habitual es que se entrena de más).