¿Cómo ayuda la fisioterapia a la fascitis plantar?

La fascitis plantar es una lesión muy común y puede provocar dolor en el pie a la hora de practicar deporte.

Noelia Hontoria

El dolor en la planta del pie puede ser el reflejo de una fascitis plantar.
El dolor en la planta del pie puede ser el reflejo de una fascitis plantar.

La fascitis plantar es un tipo de lesión que provoca microrroturas en la fascia plantar y que suele estar ocasionada por un exceso de peso, un calzado inadecuado o una intensa actividad física. Es habitual tanto en corredores principiantes como en los más experimentados, pero afortunadamente tiene solución.

Aunque en los casos más leves podemos recuperarnos con un poco de reposo, pues los síntomas apenas se hacen notar, como el hormigueo en los pies; la fisioterapia suele ser una medida muy recurrente para aliviar la fascitis plantar.

Tratamientos de fisioterapia aplicados a la fascitis plantar, ¿cómo te puede ayudar el fisio?

Con la fisioterapia se suele obtener un tratamiento personalizado que te puede ayudar a superar una fascitis plantar, poniendo especial atención en disminuir el dolor y recuperar la movilidad.

En primer lugar y siempre en términos generales, pues cada caso es único, el fisio evaluará tu estado físico para determinar el alcance de la lesión. El tratamiento puede combinar estimulación eléctrica y terapia manual, aunque depende del experto elegir la alternativa más adecuada.

No obstante, la clave suele estar en los ejercicios que te recomiende hacer después de la sesión. Normalmente deben ser indoloros, por lo que si sientes molestias, debes indicárselo para que valore si es normal o, por el contrario, necesitas cambiar de rutina.

¿Cómo ayuda la fisioterapia a la fascitis plantar?

La fisioterapia te ayudará a trabajar el arco de la planta del pie.

Con estos ejercicios, se suele buscar fortalecer la zona y recuperar la movilidad, tanto del arco del pie como de los músculos y los tendones afectados. Los más comunes son los siguientes:

  • Extensión del arco. Se puede trabajar simplemente pisando una pelota de tenis y pasándola a lo largo de todo el arco del pie, lentamente para estirar bien la zona.

  • Extensión del tobillo. Estirar el tobillo y eliminar la rigidez también es clave para recuperarse de una fascitis plantar. En casa se puede hacer con unos steps, es decir, realizando una secuencia de ejercicios sobre un escalón. Para ello, apoya el pie en el filo y sube y baja el tobillo sin mover ni desplazar los dedos de los pies.

  • Extensión de gemelos. Por último, estirar los gemelos y mantenerlos en buena forma también sirve para fortalecer el arco plantar y reducir el riesgo de fascitis plantar.

El número de sesiones de fisioterapia que necesitas para reponerte de una fascitis plantar depende del alcance de la lesión, la respuesta de tu cuerpo al tratamiento y otras condiciones. Cada persona es un mundo, por lo que debes preguntar directamente al especialista para que te haga una estimación antes de comenzar la recuperación. Pero recuerda que siempre serán cifras aproximadas y que cada paciente necesita un tiempo diferente para curar por completo la lesión.