Corredoras Anónimas: Raquel Ruiz Benito

"Correr me ha dado mucho, a parte de la satisfacción personal, he conocido a innumerables personas, sitios, rutas y caminos espectaculares... es un pozo sin fondo", afirma Raquel.

Raquel Ruiz Benito

Corredoras Anónimas: Raquel Ruiz Benito
Corredoras Anónimas: Raquel Ruiz Benito

Siempre he practicado mucho deporte, desde pequeña he jugado al fútbol y he estado federada en balonmano. Cuando empecé a estudiar la carrera me fui a Madrid a estudiar, soy de un pueblo de Ciudad Real, y allí entre la escasez de tiempo (compatibilizaba el estudio con el trabajo) y lo difícil que era encontrar gente, pistas libres y traslados, empecé hacer menos deporte. Pero como mi naturaleza deportista me lo pedía me lancé a correr, era el único deporte en el que no dependía de tantos factores externos.

Aunque para ser sinceros, y por contar la verdad verdadera, mis primeros momentos como corredora se los debo a mi padre, aunque en aquellos momentos no me resultaban tan gratificantes. Tenía 14 años, estaba en 3º E.S.O y al acabar el primer trimestre me pegue un tortazo bastante grande (en cuanto a notas) y mi padre no me dijo mucho (es un hombre de pocas palabras) solo que a partir de ese día iba a salir a correr con él.

Él solía correr todas las tardes a las 17h. A mí no me gustaba nada correr, me aburría mucho. Pensaba que era el peor castigo que me podía haber puesto, y él detrás de eso me quería enseñar lo que era la fortaleza, el sacrificio, la constancia, el esfuerzo.

Pero vuelvo a cuando le cogí el gustillo. Esa necesidad de la que os hablaba antes de hacer deporte y que canalicé empezando a salir a correr. No aguantaba ni 2 minutos, pero un día 2, otro 6, otro 12, la cosa se empezó animar. En ese momento vivía en Madrid, en una residencia universitaria con más gente y como siempre pasa con este deporte, enseguida salieron compañeras de viaje. Lo que eran 12 minutos pasaron a ser 50, eso sí, nada de relojes, ni de tecnologías, puro disfrute y sensaciones. Cogíamos el mapa de Madrid y dibujábamos los recorridos que íbamos hacer. Salíamos de Duque de Pastrana y llegamos a ir hasta Ventas, al Canal de Isabel II dar 4 vueltas y volver corriendo por la castellana hasta Plaza Castilla y la meta, casi 2 horas corriendo... no sé cuánto sería pero en nuestra ignorancia pensábamos "¿habremos llegado a los 10km? Qué va tía...eso lo hacen los pro". Ahora lo pienso después de dos medias y dos maratones de Madrid, y hacíamos una tirada larga en condiciones quitándole importancia.

Por razones de trabajo y personales, la verdad es que no he parado quieta en un sitio: de Madrid me fui a un pueblecito de Ávila, y de Ávila a Barbastro, de Barbastro volví a Madrid y actualmente vivo en San Sebastián, en Donosti.

Cuando llegue a Piedralaves, Ávila, tuve ocasión de compartir kilómetros y metas con Cristina Bofarull. Es importante tener una persona con la que compenetrarse, que te conozca, que sepa tirar de ti cuando tu decaes y viceversa. Al poco nos planteamos correr el Medio Maratón de Madrid.

media maraton de zaragoza
Medio Maratón de Zaragoza

Ya conocíamos y teníamos contacto con Pablo Sánchez Carmenado y los Drinkingrunners, pero ahí estábamos en el km 13 y se nos pusieron los pelos de punta, no solo por verlos, sino porque llegaba el momento de la separación entre la media y el maratón. Nos pasamos el resto de la media soñando en poder algún día realizar esa distancia, estar entre los que se iban por la derecha eufóricos sin ser muy conscientes de la que se venía encima después de ese subidón.

Kilómetro 13
Kilómetro 13

Aun así, al año siguiente siendo prudentes señalamos dos medias como meta en el calendario La Vía Verde y, de nuevo, el Medio Maratón de Madrid.

Y al terminar la que fue nuestra segunda decidimos entrenar para correr por primera vez la Maratón de Madrid.

Poco a poco vas aprendiendo oosas, revistas como estas te suelen orientar bastante, pero al afrontar una maratón como era nuestro objetivo, pedimos ayuda a un entrenador personal para ir contrastando entrenos.

Hubo una primera y una segunda... y no sé decir si habrá una tercera, de momento seguimos disfrutando de este deporte, sin obsesiones y sacando el valor que tiene. No hay que perder de vista que no somos profesionales y lo tenemos que compaginar con familia, trabajo, y millones de “titos” que todos conocemos. Hay momentos en que los entrenamientos no se pueden hacer, o temporadas que parece que nos pinchamos, por eso no hay que perder de vista que con este deporte disfrutamos y lo practicamos por sus beneficios para que en esas situaciones no nos frustremos, hay muchos caminos para llegar a la meta.

maraton de madrid
Maraton de Madrid

En la preparación de la segunda maratón de Madrid, vivía en Barbastro, la verdad es que gracias a un grupo de entrenamiento que llevaba Nestor Arilla y los Drinkingrunners conseguimos hacer un equipo bastante estable de #runnersdelsomontano: quedábamos todos los domingos para hacer tiradas de todos los niveles y por supuesto para disfrutar después con una buena cerveza.

Con los Drinking Runners
Con los Drinking Runners

La liamos a lo grande, y al final de ese verano, montamos una carrera Run4viñas organizada con la ayuda de los drinkingrunners y la bodega SOMMOS. Un disfrute poder correr con tanta gente, ver cómo la gente enseguida engancha con este deporte por todo lo que aporta, iba gente de todos los niveles, un desayuno potente para recuperar fuerzas y una ruta por las bodegas con cata incluida.

Carrera Run4viñas
Carrera Run4viñas

Correr me ha dado mucho, a parte de la satisfacción personal, he conocido a innumerables personas, sitios, rutas y caminos espectaculares... es un pozo sin fondo.

 

¡A seguir sumando kilómetros de felicidad Raquel! Nos has transmitido una alegría inmensa que tanto se agradece en esta situación de confinamiento.

Gracias por acercarnos tu historia.

La corredora Ana Martín Berlanas.

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