El smartphone se ha convertido en una parte fundamental de la rutina diaria. En él guardas aspectos fundamentales de tu vida personal, pero también de la profesional y, por supuesto, la deportiva. Por eso, es muy común ver a personas corriendo en compañía de su teléfono móvil, repleto de aplicaciones que mejoran su rendimiento deportivo. Pero, ¿es bueno o malo correr con el móvil?
Ventajas de correr con el móvil
Salir a correr con el móvil tiene una ventaja fundamental: poder hacer uso de apps que monitorizan tu actividad física. En ocasiones, esto se puede suplir con un wearable que incorpore un sistema de GPS y un acelerómetro, y que además vuelque los datos a la app vía Bluetooth cuando lo vincules con el smartphone. Sin embargo, hay muchas aplicaciones que no permiten el emparejamiento con ciertos wearables.
Además, el móvil también te sirve para escuchar música mientras corres. Un complemento que tiene la capacidad de modificar tu zancada y que te ayuda a mantener un ritmo más elevado. Aunque, en este caso, también existe una alternativa: usar un MP3 más clásico.
No obstante, para muchas personas la máxima ventaja de correr con el móvil es poder estar conectados, tanto si quieres localizar a un amigo para salir a correr con él como si tienes una emergencia. Esto es prioritario, sobre todo, si padeces algún problema de salud, si sufres una lesión inesperada o si vas a transitar zonas solitarias o relativamente peligrosas. El móvil te puede salvar en más de una ocasión. Investiga si tiene función SOS y actívala.
Desventajas de correr con el móvil
Uno de los inconvenientes de correr con el móvil es que puede ser una fuente de distracciones. Si lo tienes con sonido, a veces cuesta desconectar. De hecho, muchas personas necesitan revisar sus notificaciones cada pocos minutos. Si esto se repite durante todo el entrenamiento, puede perjudicar a tu rendimiento.
Precisamente esta incapacidad para desconectar puede provocar también cierto estrés. Ten en cuenta que cuando estás haciendo deporte, ejercitas no solo tu cuerpo, también tu mente. Practicar ejercicio físico es un buen antidepresivo y puede mantener alejado ese estado de tensión. Por ello, debes aprovechar para eliminar, al menos durante ese rato, cualquier aspecto que pueda generar el mínimo estrés.
La última desventaja es que si no tienes un móvil con un buen certificado de resistencia, puede estropearse con las posibles caídas o los golpes. Si vas a utilizarlo para salir a hacer deporte, puedes escoger uno con IP68, que es el mayor grado de protección (también para el agua y el polvo), y cristal Corning Gorilla Glass 5. Además, para más seguridad, puedes instalar una funda que proteja la pantalla, la parte más sensible y expuesta de los smartphones.