La llegada de la gama 'Max' a Brooks ha sido la demostración de cómo una marca se adapta a las tendencias y consigue lanzar zapatillas con identidad propia pero siguiendo las novedades en lo que a estilo o apariencia se refiere. Y sí, hablamos de zapatillas 'gordas' estéticamente, pero donde cada modelo es un mundo.
Hemos estado haciendo kilómetros con las nuevas Brooks Ghost Max 2, tras haber hecho unos cuantos kilómetros con sus 'primas lejanas' Ghost. Y es que pese a compartir gran parte del nombre, nos encontramos con dos modelos totalmente diferentes. Mientras unas son un modelo polivalente, ésta MAX son una zapatilla para usar algunos días sí, y otros no.
Y es que no engañan a nadie. Tras ver esa suela y esas formas, está claro que las Brooks Ghost Max 2 son unas zapatillas donde la comodidad es su principal valor. Su diseño tiene el objetivo de dar amortiguación a tus zancadas, protegerte y ayudarte a que puedas correr con el menor impacto posible. Y eso lo consiguen sin caer en la apariencia 'chiclosa' de otras espumas. Notas el suelo, notas la pisada, pero la sensación es amable en todo momento, incluso si tienes a talonar más de la cuenta.
La clave es la aportación de la nueva espuma de Brooks DNA LOFT v3 con nitrógeno infusionado, que consigue darnos comodidad sin perder firmeza. Y gracias a esto se consigue evitar sensación de lentitud o 'aplatanamiento'. Ahí su drop de 6mm tiene mucho que decir.
Con todo, su contundencia en la amortiguación, su peso de 309 g y su forma hacen que el día que queramos apretar el ritmo, el calzado no nos añade ese plus que sí tienen sus primas lejanas 'sin MAX'. Sin embargo, la recuperación post carrera será ideal y nuestro cuerpo sufrirá menos el desgaste de los entrenamientos.
Pese a no contar con estabilidad añadida, la forma, el tamaño ancho, y la colocación de los materiales consiguen darnos un apoyo extra, si no somos pronadores en exceso. Además, la forma curva de la puntera nos echa una mano a la hora de realizar transiciones y reducir nuestros esfuerzos. Sin reactividad, pero con mucha efectividad en cada zancada.
Y es que estas GHOST MAX 2 son ese modelo que tenemos a mano para el día que nos apetece 'rodar cómodo', acompañar a alguien más lento que nosotros (si lo hubiera), o cumplir una sesión suave de kilómetros. Aunque nosotros la hemos llevado a distancias de dos dígitos y la sensación ha sido ideal, por lo que si nos planteamos superar el medio maratón sin querer ritmos frenéticos, también son un modelo a tener muy en cuenta.
La sensación de la parte superior mantiene la línea de comodidad de todo el modelo, con un upper suave y esponjoso, donde el único posible pero es una leve ausencia de ventilación, sacrificada para que las sensaciones sean las mejores en cada zancada. Cuenta con un gran ajuste sin aprisionar el pie. El ajuste es firme y agradable, siendo un elemento más que añade Brooks en esa búsqueda de comodidad extrema.
Nos atrevemos a decir que corras la distancia que corras y al ritmo que sea, este modelo te aportará algo en algún momento. Si eres de los corredores rápidos lograrás entrenamientos cómodos los días de 'descanso activo' o de rodaje, si estás empezando, serán un aliado ideal para los 'ca-cos' o superar los primeros kilómetros sin hacer sufrir demasiado a tu cuerpo y si ya te estás asentando en los 10 kilómetros y quiere aumentar distancias sin mirar el reloj, las Brooks Ghost MAX 2 te aportarán esa confianza necesaria para añadir kilómetros a tus piernas con una comodidad plena.