Corredoras Anónimas: Desirée Trigueros

"Ahora me pregunto: ¿quién no ha sentido alguna vez que el corazón va a mil por hora? Esa sensación compartida es la que sentimos todos en la línea de salida", apunta Desirée.

Desirée Trigueros

Corredoras Anónimas: Desirée Trigueros
Corredoras Anónimas: Desirée Trigueros

El equipo de CORREDOR\ sigue trabajando con gran esfuerzo e ilusión para manteneros informados. Si quieres apoyar nuestro periodismo y disfrutar de las ventajas de hacerte prémium, suscríbete a nuestra web aquí (el primer mes es gratuito*).


¡Vértigo! Eso es lo que sentí cuando me propusieron redactar mi historia. Pensaréis que soy una dramática, pero no, porque a través de mi experiencia sé que estoy poniendo “voz” a las vuestras. Vosotras sois unas auténticas valientes, lo sé. Os calzáis las zapatillas y salís a derribar límites, esos que vosotras mismas, inconsciente o conscientemente, os habéis puesto o, que la sociedad nos impone; salís a correr y vencéis miedos, conquistáis fronteras y, por supuesto, os convertís en personas más fuertes y capaces.

Yo siempre tengo presente frases motivadoras y optimistas que me dan empujoncitos de vez en cuando y me ayudan a no abandonar o a enfrentarme a determinadas situaciones, como la de Nereida Centeno, que dice: “¡Hazlo! Y si te da miedo, ¡hazlo con miedo!

Y bien, centrándome un poquito en cómo empecé en esta disciplina, echo la mira atrás y recuerdo que cuando yo era pequeña no había gran oferta de actividades extraescolares para los niños y niñas, siempre era lo mismo, fútbol y baile, evidentemente uno destinado a los chicos y otro a las chicas. Y yo pensaba: "¿y yo qué?" No me gustaba el baile y no había equipo femenino de fútbol, así que me colaba en los partidos del barrio con mis hermanos y amigos.

Como cada Navidad, había un cross o carrera popular en mi pueblo, yo me inscribía y nunca fallaba a mi cita. Siempre era domingo, y aprovecho para destacar que antes no era como vemos o vivimos actualmente, eventos a los que acuden los padres a ver y animar a sus hijos, sino que yo me levantaba, me ponía mi chándal y los deportivos de hacer educación física en el colegio y me dirigía a la zona de salida de la carrera. Al llegar, todo lo que veía me abrumaba, familias completas de atletas, las niñas iban con las “braguitas” de atletismo, en tirantes… y yo, yo con mi chándal de invierno, pues era Navidad y hacía frío. Y, justo en ese momento, empezaban los miedos, dudas y me preguntaba: "¿para qué he venido?" Esto no es para mí, es imposible, la gente viene muy preparada… pero jamás abandoné, me colocaba en la línea de salida y a correr. No sé cómo lo hacía pero llegaba a casa con dos trofeos, el de la categoría y el de corredora local. ¡Qué felicidad! Y así fue durante varios años, corría de Navidad en Navidad.

Esta fue mi primera toma de contacto con el running. Tras ello, durante mi época en el instituto y en la universidad me convertí en una corredora intermitente, es decir, había temporadas en las que empezaba a retomar el deporte y, pasados unos meses abandonaba la disciplina.

Entonces conocí a Abel, mi novio, él sí era constante entrenando con su grupo de amigos, se apuntaban a carreras e iba a verlos, así que el gusanillo de retomarlo me invadió de nuevo y me apunté a un 10k en Rojales, momento en el que me coloqué de nuevo un dorsal. Comencé a entrenar pero volví a abandonar. Hay una frase de Josef Ajram que refleja perfectamente lo que me faltaba: “Todos debemos tener un objetivo constante, para estar constantemente motivado”, y es así, me siento totalmente identificada.

WhatsApp Image 2021 09 15 at 18.35.20
Preciosos instantes con Abel
 

Es por ello que, en 2016, me propuse ser constante, me lo debía a mí misma, ya que lo que siento cada vez que acabo de entrenar es una sensación que ningún otro deporte me provoca, es algo indescriptible. Solo el que lo experimenta me comprende, esa sensación de libertad, de sentirte fuerte, capaz y feliz. Además, soy una persona comprometida, a la que le encantan los retos y sabía que si me marcaba un objetivo no iba a abandonar. Mi objetivo fue correr mi primera media maratón, ¡madre mía 21 kilómetros corriendo. Y…meses más tarde, ¡voilà!, conseguido.

Disfrutando compitiendo en la mejor compañía
Disfrutando compitiendo en la mejor compañía

Tras alcanzar mi objetivo me encontré físicamente muy delgada y me aconsejaron no salir a correr, así que me apunté al gimnasio y realizaba sesiones de fuerza para subir la masa muscular, pero no estaba motivada, ese no era mi espacio, no estaba cómoda y encima no era feliz. Después de todo un año de veros salir a trotar, competir en diferentes carreras… las ganas de correr se apoderaban de mí, ¡qué envidia! y sólo engordé 3kg, ¿tanto esfuerzo para tan poco peso? ¿Me compensaba? La respuesta fue rotunda y tajante: no, no me compensaba. Por lo tanto, decidí hacer lo que me gustaba, volví a correr de nuevo, pero seguía igual, haciéndolo de forma intermitente, empezaba y lo dejaba, o bien por estudios, momentos de desmotivación…

Y llegó la pandemia, lo primero que deseaba hacer cuando levantasen las restricciones era correr, sentirme libre después de todo lo vivido y así fue, mi primera salida fue a correr, ¡qué sensación! Pasó el verano, seguía entrenando y empecé a trotar por montaña, pero estaba estancada y sentía la necesidad de mejorar. Aprovechando que en algunos de mis entrenos veía a Pedro Esteso junto a un grupo de runners, me decidí a contactar con él para que me planificase los entrenamientos. Desde entonces tengo un entrenador y coach motivacional, lucho en cada salida, sintiendo esa felicidad y satisfacción al finalizar cada sesión. Pero sí, se sufre, se sufre mucho. Además, hay ocasiones en las que los ritmos no salen como creemos, pero cada entreno suma y nos ayuda a crecer, a estar un poquito más cerca de conseguir aquello que nos hayamos propuesto.

WhatsApp Image 2021 09 15 at 18.35.56
Siempre es una alegría verte en el podio

Ahora me pregunto: ¿quién no ha sentido alguna vez que el corazón va a mil por hora? Pues esa sensación “agridulce” es la que siento yo junto a muchos corredores cada vez que nos ponemos en línea de salida, da igual la distancia, el objetivo de cada uno…la sensación es compartida y, ¡qué sensación! ¿Te animas a experimentarla?


PÓDCAST: Claves psicológicas para ser una mejor corredora

Puedes suscribirte al pódcast CORREDOR en las principales plataformas: iVOOXApple y Spotify.

Archivado en:

Corredoras Anónimas: Luz Barrios

Relacionado

Corredoras Anónimas: Luz Barrios

Corredoras Anónimas: Laura García Palma

Relacionado

Corredoras Anónimas: Laura García Palma