A PRUEBA | Sujetador Saucony Skyrocket

Nunca se habla lo suficiente de lo bien que funciona la sencillez aplicada a cualquier cosa. El sujetador Saucony Skyrocket nos da la excusa perfecta para alabar sin tapujos la simplicidad bien entendida.

Noemí Alonso

Sujetador Saucony Skyrocket
Sujetador Saucony Skyrocket

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Si por su nombre estabas pensando que el Saucony Skyrocket Bra es una prenda de líneas futuristas, atrevidas, casi galácticas, quizá te decepcione un poco encontrar (a menos que ya lo conocieras) un sujetador deportivo para correr con el diseño de nadadora “de toda la vida”. A simple vista, no hay nada más… y nada menos, porque, en este caso, podemos afirmar que lo tradicional funciona perfectamente. La marca añade unos toques de ingenio muy estudiados para mejorar el conjunto sin interferir en la estética clásica y ofrece una pieza que te acompañará mucho, mucho tiempo.

Para empezar, tenemos la durabilidad de los materiales utilizados en su ejecución: Saucony está empeñada en que su ropa y zapatillas aguanten el paso de los años, pero también muestra un fuerte compromiso con la sostenibilidad, por eso intenta emplear materiales “eco” siempre que es posible. Por ejemplo, el nylon reciclado compone el 75% de esta prenda y eso proporciona a partes iguales elasticidad (ayudada, evidentemente, por un 25% de spandex) y soporte. 

Detengámonos un momento en este apartado, porque es el que más interesa en un sujetador para running. Te confieso que, al principio, ver las tres sencillas piezas con las que está confeccionado (frontal, trasera y el elástico bajo el pecho) me hizo dudar de su efectividad. Pero tras los primeros kilómetros, me convencí: nada se bambolea o se desplaza de forma incómoda. Tampoco te sientes aprisionada, ni mucho menos, pues una de las ventajas, precisamente, de la espalda de nadadora es permitir una amplia libertad de movimientos. 

¿Cómo consiguen las tres piezas mencionadas un soporte tan eficaz? Fíjate en el panel frontal, que extiende los laterales hasta meterse unos centímetros en la zona trasera: eso aporta sujeción en los costados sin añadir costuras de más que puedan provocar rozaduras. Asimismo, evita romper un diseño tan sencillo como eficiente.

Esta simplicidad llega incluso al interior, donde el forro no se ve interrumpido por las típicas aberturas para el relleno de las copas (no lleva, lo que personalmente agradezco. Manías de cada una). Efectivamente, con eso se logra un mayor firmeza y, de nuevo, menos remates y dobladillos. El material va de lado a lado, lo que redunda en la comodidad de la prenda, permitiendo que la estires hacia todas partes por igual. ¿Adivinas lo que significa eso? Exacto, que ponerte o quitarte el sujetador Saucony Skyrocket es muy cómodo.

También vas a notar ese confort en detalles como la suave felpa que recubre el interior del elástico inferior o en el panel de malla que conforma la espalda. No solo está ahí para añadir un toque sexy a un clásico, sino, sobre todo, para mejorar la ventilación y la transpirabilidad. Si has intentado entrenar este verano, enganchando una ola de calor tras otra, te harás a la idea de las ventajas que proporciona. ¿Prefieres salir de noche para evitar las altas temperaturas? El logo es reflectante con el fin de que seas vista. Sí, Saucony no ha arriesgado con nada, pero las sutiles optimizaciones hacen que todo siga funcionando. Ah, el encanto de la sencillez

Precio: 34 €


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