Carpaccio de piña, mandarina y helado de vainilla

Prepara un postre refrescante combinando sabores y diferentes texturas: una fruta al natural, una crema y un helado.

Paco Roncero

Carpaccio de piña, mandarina y helado de vainilla
Carpaccio de piña, mandarina y helado de vainilla

 

Jugar con los sabores y las texturas es la base para que un plato sea redondo, siempre que la combinación sea coherente. Hoy preparamos un rico postre que puedes combinar con otras frutas que tengas en la nevera, prueba y analiza tú mismo.

Postre para el confinamiento: Carpaccio de piña, mandarina y helado de vainilla

Ingredientes (4 personas):

Para el carpaccio de piña:

  • Piña - 1 unidad

Para la crema de mandarina:

  • Zumo de mandarina - 500 gr
  • Maicena - 30 gr
  • Azúcar - 40 gr
  • Yema de huevo - 2 unidades

Para el helado de vainilla:

  • Leche entera - 120 ml
  • Azúcar - 50 gr
  • Huevo - 1 unidad
  • Vainilla fresca - 1 unidad
  • Nata - 120 ml

Otros:

  • Gajos de mandarina

 

Elaboración:

  • Para el carpaccio de piña: pela la piña, haz rodajas finas y reserva.
  • Para la crema de mandarina: retira una parte del zumo de mandarina y haz una mezcla con maicena y las yemas de huevo. Pon el resto del zumo de mandarina a fuego fuerte, lleva a hervor y retira; fuera del fuego añade la mezcla preparada anteriormente, remueve y vuelve a incorporar a fuego medio hasta que espese la crema. Enfría y reserva.
  • Helado de vainilla: calienta en un cazo la leche junto con el azúcar, y cuando enfríe un poco viértelo sobre el huevo batido. Devuelve la mezcla al cazo y cocinar a fuego lento removiendo hasta que espese. Añade la vainilla, remueve de nuevo y dejar enfriar. Bate la nata y añade a la mezcla. Introduce el recipiente al congelador durante media hora. Saca y bate. Después vuelve a meterlo en el congelador durante mínimo 4 horas. Es conveniente sacar el helado del congelador unos minutos antes de su uso para que esté más cremoso.

 

Acabado y presentación:

  • Sobre el fondo de un plato llano, coloca las rodajas de piña en forma circular y cúberlas con una capa fina de crema de mandarina. En el centro del carpaccio coloca una quenelle de helado de vainilla y alrededor de ésta, varios gajos pelados de mandarina.
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