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Hemos hablado hasta la saciedad, tanto en nuestra revista en papel, como en nuestra web, como en nuestro pódcast, de las consecuencias directas que el confinamiento está teniendo en nuestro organismo, nos ha alterado por fuera y por dentro y, por ello, la vuelta al deporte al aire libre debe ser paulatina y teniendo especial cuidado con los movimientos musculares.Y, aunque ahora no estemos en confinamiento, las noticias de los medios de comunicación son todo menos alentadoras sobre nuestro futuro, por lo que realizar una pequeña rutina de estiramientos cada día, para mantener el tono muscular y evitar contracturas, es invertir en nuestra salud.
El estrés que hemos padecido, y seguimos sintiendo, aunque no seamos conscientes de ello, puede estar haciendo que nuestros músculos estén más tensos de lo normal. Es importante tenerlo en cuenta y dedicar un tiempo diario a paliar estos bloqueos.
Si a ello le sumamos el teletrabajo, con la mayoría de los casos, en casa, con la silla y mesa que teníamos... es probable que la postura no sea la correcta y nuestro cuello y espalda estés sufriendo, además, más de lo habitual.
Con diez minutos al día, de manera constante y consciente, no hacer por hacer, sino interiorizando nuestra respiración y relajándonos será la clave para aliviar esos incómodos dolores. Busca el momento del día más propicio para ti, evitando nada más levantarte ya que estamos más rígidas, nuestros músculos están fríos.
RUTINA PARA ESTIRAR A DIARIO Y ALIVIAR TENSIONES
- Estiramiento de cuello: le decicamos un artículo completo dada su importancia. De pie o sentada con la espalda erguida, con la mirada al frente. Apoya la mano en la parte superior y uno de los lados de la cabeza y deja que el peso de esta acerque la oreja opuesta al hombro. Posteriormente cambia de mano y de lado, importante no tirar sino dejar que el peso de la mano sobre la cabeza sea quien ejerza la fuerza.
- Estiramiento de espalda: de pie elevando los brazos por encima de la cabeza intentando alargarte lo máximo posible, lleva las manos y el tronco hacia un lado mientras notas que se estira el opuesto, luego cambiamos de lado. Hay que mantener la tensión durante unos 30 segundos para notar cómo se relaja la musculatura de la espalda.
- Estiramiento de cuádriceps. de pie con una mano sujétate a una pared para no perder el equilibrio, y con la otra mano sujeta el pie a la vez que acercas este al glúteo flexionando la rodilla. Después de 30 segundos, realiza el mismo movimiento con la otra pierna.
- Estiramiento de glúteo y piramidal. tumbada en el suelo boca arriba, con la espalda completamente recta, flexiona las rodillas y cruza una por encima de la otra, apoyando la parte lateral de la pantorrilla o tobillo de la pierna que cruzas en el cuádriceps de la otra. A continuación, con las dos manos, cógete por el isquiotibial la pierna que sigue apoyada en el suelo y tiram de ella hacia ti; notando la tensión en el glúteo de la pierna que has cruzado. Tras 30 segundos aguantando en esa posición, realiza el mismo ejercicio con la pierna contraria.
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