Hernán Silván

Médico.

Doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), con sobresaliente cum laude por unanimidad. Director médico del Centro de Recuperación Funcional de Madrid, donde trabaja como Médico Osteópata desde 1988.

Detectar el talento va mucho más allá de ver quién llega primero o hace mejor marca. iSTOCK

La tesis del sabio

Opinión

Había desarrollado una habilidad que los otros no tenían. Podía detectar talentos con tal porcentaje de acierto que no dejaba duda ni a propios ni a extraños.

Sí, claro que sí; un tren superior fuerte es fundamental para correr más y mejor. iSTOCK

El tren superior

Salud

Dos y no una son las cinturas del humano. La llamada cintura escapular, que se constituye con las articulaciones del hombro, complementa a la más popular cintura pélvica.

A veces un pequeño gesto es suficiente para que nuestra motivación se desborde. | VSMPHOTOEVENTS

Motivación

Opinión

Las reflexiones de Hernán Silván en su sección 'Correr no es de Cobardes' del número 33 de la revista Corredor.

El síndrome de aductores es uno de los más comunes entre los corredores habituales. ISTOCK

El síndrome de aductores

Salud

Los músculos internos más importantes del muslo son los aductores que, en número de tres y respondiendo a los nombres de mayor, mediano (o largo) y menor, están sujetos al borde inferior del pubis en su origen, y se extienden para insertarse a lo largo del borde interno del fémur (el único hueso del muslo).

Los meniscos son unos fibrocartílagos que están interrumpidos en la zona central a la altura de las espinas tibiales

Todo sobre el pinzamiento de menisco

Salud

La rodilla, articulación intermedia del miembro inferior, está dotada de un movimiento principal en el eje anteroposterior: la flexo-extensión. Con este movimiento acercamos, cerramos o abrimos la articulación y ello nos permite conformar la zancada.

Para seguir corriendo durante muchos años tenemos que cuidarnos y tratar de mantener a raya las lesiones

Las fracturas por estrés óseo

Salud

En ocasiones, el entrenamiento nos absorbe hasta tal punto que nuestro organismo no es capaz de asumir la carga física. En esos momentos de sobrecarga, podemos causar tanta presión sobre nuestro cuerpo que, incluso, nuestros huesos pueden llegar a ceder.